Crítica de «El Juego del Calamar 2»: Una temporada con un final insatisfecho
El miércoles 26 de diciembre, Netflix por fin estrenó la segunda temporada de la serie surcoreana, producción escrita por el guionista de Corea del Sur, Hwang Dong-hyuk. Esta nueva parte dejó crítica de «El Juego del Calamar 2».
La primera temporada de El Juego del Calamar se convirtió en un fenómeno global, y las expectativas para esta secuela eran altísimas. En Chile y en otros países, la campaña promocional de la serie fue tan intensa que incluso personajes como Eskarcita y Emilia Dides protagonizaron un comercial promocional. Este nivel de visibilidad dejó claro que la serie, sin importar las críticas, continuaría siendo uno de los grandes atractivos de Netflix.
Crítica de «El Juego del Calamar 2»
La historia de la segunda temporada comienza con un giro en la trama. El protagonista, Kim Ji-yeon, presenta un cambio de imagen notable y se embarca en una nueva aventura para confrontar a los poderosos organizadores del cruel juego que en la temporada anterior llevó a la muerte a cientos de participantes. La premisa es interesante: Ji-yeon busca evitar que los ciudadanos endeudados de Corea del Sur sean arrastrados nuevamente al juego mortal, mientras trata de desmantelar la red detrás de esta macabra competencia.
A lo largo de la temporada, el personaje de Ji-yeon se ve acompañado por varios aliados, lo que le permite enfrentar nuevas amenazas. Un momento clave es cuando uno de sus amigos es brutalmente asesinado, lo que muestra la cruda naturaleza del juego. A través de un desafío de «piedra, papel o tijera», Ji-yeon toma la vida de su agresor y logra infiltrarse en el juego, lo que marca el inicio de una nueva y peligrosa aventura.
Aunque la trama mantiene el suspense, la ejecución de algunos giros narrativos y el desarrollo de ciertos personajes deja que desear. Por ejemplo, la forma en que se presentan los nuevos participantes y sus historias, aunque atractiva en un principio, no siempre logra conectar emocionalmente con la audiencia. En este sentido, la serie parece más centrada en la violencia y los giros inesperados que en la profundización de los personajes y sus motivaciones, algo que está super y que en esta serie ya entendemos cual será su destino.
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Personajes interesantes que no vimos en la primera
Algo positivo que rescato es que la trama está muy bien hecha, nuevos asesinatos, dos historias totalmente interesantes, también el hecho de que no se repiten los mismos juegos que la primera parte, algo que no me lo esperaba y que tampoco los jugadores que no llegaran a la parte final del concurso para no repetir la palabra, ya que deciden enfrentar a los guardias y matando a la gran parte de ellos.
Ahora en la parte de los personajes, no se asemejan a la temporada estrenada en pandemia. Podemos ver a un competidor que entra con la madre y en el buen chileno lo podemos catalogar como muy «mamón», pero la madre lo cuida hasta el último segundo de la serie.
Por otra parte, entran dos participantes, una transformista que cuenta su historia a la madre del recién jugador nombrado y otra chica que entra embaraza para ganar el juego y poder mantener a su hijo. Ella se encuentra con el padre en la sala y le confiesa que no quiso abortar porque lo quería criar, tanto que con el tiempo le demuestra que quiere volver con ella, pero esta no le cree porque piensa que le quiere robar el dinero.
Otro personaje que no me extraña que estuviese, podríamos decir que el típico villano que busca la superioridad y lastimar a los indefensos convenciendolos en seguir jugando y chantajeándole que los va a ayudar, este papel se lo llevó Choi Seung-hyun, conocido como T.O.P en el mundo K-pop, interpreta al jugador 230.
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Participantes confundidos y final que no convence
Como en toda buena historia, no falta el personaje villano que se cree superior al resto. En esta temporada, la villana juega un papel de manipuladora, similar al del cantante de la primera temporada. Sin embargo, su propósito nunca queda claro. Si bien la mayoría de los participantes están endeudados, no se explora en profundidad por qué ella decide entrar al juego ni qué la motiva realmente. Esto deja al personaje algo vacío y difícil de comprender.
El final de esta temporada es, sin duda, uno de los aspectos más polémicos. Como mencionábamos al principio, los jugadores finalmente enfrentan a los responsables de este terrible juego, y muchos de ellos mueren en el proceso. Sin embargo, el giro final, donde el jugador que parecía ser el más «bueno» se revela como el verdadero villano, no logra impactar como se esperaba. El personaje, que había ayudado al grupo en varias ocasiones, de repente toma la decisión de exterminarlos, pero esta transformación se siente abrupta y poco justificada dentro de la trama.
Para concluir la crítica de «El Juego del Calamar», el actual ganador del juego es capturado por los guardias, y su hermano es asesinado como acto de venganza. Este desenlace, aunque con tintes dramáticos, no consigue cerrar de manera satisfactoria la historia. La primera temporada dejó un nivel de intriga y emoción mucho mayor, mientras que esta segunda entrega termina de manera apresurada y sin la misma tensión que había caracterizado al inicio.
Recordemos que el director de la serie insinuó que la segunda y tercera temporada que se estrenará en 2025, era como si fuera una misma trama completa.